Cargadores microUSB, ¿son todos iguales?

Cada vez tenemos más gadgets que se cargan utilizando el estándar microUSB. En mi caso, me he juntado con varios smartphones, un tablet, un lector de libros electrónicos, todos con su correspondiente cargador. Si estáis en una situación similar os habréis preguntado alguna vez,¿qué pasa si los intercambio, se estropeará alguno de mis aparatos por usar el enchufe de otro?

La respuesta corta: No debería suceder nada malo, aunque probablemente influya en el tiempo de carga.

Para la respuesta larga, vamos a repasar un poco de electrónica y cómo se aplica en el estándar USB. La potencia, en Watios, es el producto del voltaje en Voltios por la intensidad de corriente en Amperios. Dado que los cargadores USB trabajan todos a 5 V, lo que influye en la “cantidad de energía” que pueden transmitirnos es el amperaje. Si os fijáis bien, en todos lo especifica en la letra pequeña, en el propio cargador: los más básicos son capaces de entregar 500 mA (es decir, 0,5 A) y los de tablets y dispositivos con baterías de mayor capacidad, 2000 mA o incluso más. Si lo pasamos a Watios, vemos que se traduce en un rango de entre 2,5 W y 10 W, inferior a casi cualquier bombilla de casa.

En este ejemplo de HTC se proporciona hasta 1 Amperio (1A) de salida (OUTPUT)

Las baterías de nuestros móviles tienen una variación bastante grande, por ejemplo entre elSmart Chat (1100 mAh) y el Smart Tab II 7 (3550 mAh) hay una diferencia considerable. A igual voltaje, se entiende que o metemos más corriente o tardamos mucho más en cargarlo…

Por suerte el modo de carga “inteligente” que se definió a partir de la versión 2.0 del interfaz USBnos permite aprovechar la capacidad extra de los cargadores actuales. Eso sí, si vuestro dispositivo es anterior a 2007 no va a “saber” utilizar un cargador actual, quedando relegado a los puertos del ordenador.

Por lo tanto, si estamos usando un smartphone actual podéis cargarlo sin problemas usando el enchufe de un amigo, de un compañero de trabajo o incluso el del tablet si no tenemos el suyo original a mano, siempre que respeten el estándar USB. Podría incluso completarse el proceso antes, si el cargador “alternativo” tiene mayor amperaje y somos capaces de aprovecharlo.

Al contrario, si tenemos un tablet y no nos queda otro remedio, nos tocará usar el adaptador de un smartphone básico y tener un poco de paciencia: tardará más en completarse la carga…

Aparte nos dejamos casos como tablets muy específicos que usan cargadores de 30 pines a 12 Voltios, pero claro, no son parte del estándar USB y físicamente no nos será posible “meter la pata”.

Vía | Extremetech