domingo, 13 de enero de 2013

Cuentos, mitos y leyendas - Las sirenas



Las sirenas son seres de la mitología griega y ampliamente extendidos en las narraciones fantásticas.

Aunque en su forma original eran genios marinos híbridos de mujer ave posteriormente la representación más común las describe como hermosas mujeres con cola de pez en lugar de piernas.
La tradición las hacía habitar en una isla del Mediterráneo (Capri) frente a Sorrento,  en la costa amalfitana.



En el marco de la mitología griega  las sirenas son criaturas ligadas al mundo de los muertos y las encargadas de transportar las almas  al Hades.
En época preclásica las sirenas adquirieron un carácter maligno de matiz monstruoso, pues el influjo irresistible de su canto llevaba intencionadamente a la perdición. Las naves que se acercaban a su isla acababan estrellándose contra las rocas y ellas devoraban a los marineros, dejando la costa repleta de huesos.

Las sirenas se observaron en el folclore británico como presagios de mala suerte.

Una leyenda muy popular en Gales es la de Murgen: En el siglo VI, una sirena fue capturada y bautizada en el norte de Gales, y se le enseñó la lengua nativa. Se dijo que no era pez porque cosía y hablaba, pero no era mujer porque podía vivir bajo el agua. La sirena figuró bajo el nombre de Murgen que quiere decir mujer que viene del mar.

En Irlanda a los sirénidos los llaman merrows. Creen que el número de hembras es superior al de los machos, aunque estos son más feos que sus compañeras: un merrow masculino poseen dientes puntiagudos y rostro semejante a un cerdo.
Todos los merrows se caracterizan por las membranas de sus manos, su hostilidad hacia los humanos y sus prendas mágicas, que les permiten atravesar cualquier corriente oceánica.

En la mitología escocesa una sirena llamada Ceasg o "doncella de las olas". La parte inferior de esta sirena es la de un salmón. Se dice que a aquellos que la capturan les concede tres deseos si la devuelven al agua, pero cuando un hombre se enamora de ella, la mujer-salmón lo seduce y lo arrastra a las profundidades
En China las sirenas son una especie cuyas lágrimas se convierten en perlas preciosas. Las sirenas también pueden tejer un material muy valioso que no solo es ligero sino también hermoso y transparente. Debido a esto, los pescadores siempre tenían ganas de agarrarlas, pero el canto de las sirenas lo dificultaba.

En otras leyendas chinas, las sirenas son unas criaturas maravillosas, hábiles y versátiles y estaba mal visto que los pescadores quisieran capturarlas.

La leyenda danesa cuenta que los cantos de las sirenas embrujaban a los hombres del mar. En su capital Copenhague, un humilde pescador fue sucumbido por los cantos de una joven sirena mientras faenaba, entonces la Sirenita renunció a su inmortalidad a cambio de poseer el aspecto de una mujer. De esta forma, conseguiría mantener el amor de su príncipe.



La Sirenita 'La pequeña señora del mar' es una escultura de bronce, que se encuentra en la ciudad de Copenhage y es el símbolo más prominente de la ciudad. Cumple 100 años este 2013.

Las historias de sirenas también son muy famosas en la península ibérica, hay una gran cantidad de relatos acerca de mujeres-pez que seducen a los marinos, aunque en otros, estas ninfas son totalmente benevolentes.

Es famosa en Cantabria la historia de La Sirenuca una sirena que antes fue humana. Su madre, harta de que la desobedeciera para ir a los acantilados, gritó "Permita Dios que te vuelvas pez", y así sucedió. Desde entonces, alerta con su canto a los marineros de que se acercan peligrosamente a los acantilados. Esta es una de las pocas sirenas completamente buenas de la mitología europea.

En el País Vasco son muy populares los seres mitológicos llamados Itsas-Lamiak, que en castellano significa Lamias del mar. También se les llama Arrainandereak (mujeres-pez).

Las Itxaslamiak peinan sus cabellos con peines de oro de los que dependen totalmente. Quien quiera dominarlas puede robarles el peine, aunque eso las enfurece, pudiendo ahogar al ladrón o traer mal tiempo a las costas. Sin embargo, no siempre son malas y a veces se enamoran apasionadamente de los marineros que rondan por las costas vascas.

En la mitología extremeña también hay sirenas, pero éstas viven en los ríos, de los que salen para ahogar a los hombres después de seducirlos con sus cantos. Se cree que hay una sirena que nada por las aguas del Tajo y otra que cada noche de San Blas, sale de la fuente de Luná en Usagre para atraer y ahogar a sus víctimas.

Aunque en la iconografía moderna las sirenas se representan por lo general como de abrumadora belleza, es probable que en la tradición clásica su único atractivo radicase en su voz, y que su apariencia fuese poco menos que monstruosa.

Os invito al siguiente documental. Duración de una hora y media




2 comentarios:

  1. John William Waterhouse, es el prerrafaelista que más me gusta. Preciosa cuadro el que has elegido para esta entrada!

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  2. Desde Pequeña y adolescente me encantaba los cuentos e historias de sirenas...imaginaba y dibujaba el mundo marino de esas bellas mujeres...

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