Durante los últimos años se han visto incrementadas, sobre todo en las principales ciudades del país, las visitas regulares a los grandes centros comerciales por parte de personas de diferentes edades y estratos sociales.

CC Metropolis
Solo basta con acercarse a alguno de los concurridos malls de la ciudad y percatarse que, sin importar la hora, el día ni la fecha, los estacionamientos se encuentran colmados y los espacios comerciales no dejan de estar repletos de gente, ya sea comprando o dando vueltas de tienda en tienda.

Según un estudio presentado en octubre de 2007 por DATANÁLISiS para la Cámara Venezolana de Centros Comerciales, Comerciantes y Afines (CAVECECO), 85% de la población urbana venezolana visita, al menos cada 15 días, los centros comerciales.

Las personas de los estratos sociales más altos, con edades comprendidas entre los 18 y 24 años, son quienes asisten con mayor frecuencia a los centros comerciales. Resulta interesante comparar con años anteriores, cuando las personas de entre 25 y 49 años, eran quienes visitaban mayormente los malls de la ciudad.

En promedio, según este estudio, cada venezolano que recurre a un mall, lo recorre durante 2 y 3 horas viéndose reducido, en relación a años anteriores, el porcentaje de personas que solo van a pasear sin consumir, si quiera un refrigerio, en los centros comerciales.

En cuanto al consumo, 54% afirmó hacer compras variadas entre las cuales destacan ropa y calzado, 34% consume comida y solo 16% utiliza estas horas para sus diligencias bancarias. Es así como el gasto del venezolano promedio, cada vez que visita un centro comercial es de 126.160 bolívares o 126,16 Bs.F. Aún así, las compras en locales comerciales ubicados en calles o bulevares, siguen abarcando 37% de las compras de los estratos sociales más altos.
CC Sambil Valencia
Actualmente, según cifras de CAVECECO, hay 400 malls en el territorio nacional que suman un centro comercial por cada 65 mil habitantes, y se espera reunir cifras de un mall por cada 35 mil habitantes para los años venideros. Esta última cifra indicará la estabilidad del mercado comercial venezolano que, desde hace algunos años, producto de la inseguridad y la falta de confianza por parte de los comerciantes, había venido en decaimiento.

Es así como los malls se han convertido en un factor determinante para dar mayor fuerza a la economía venezolana, ya que le ofrecen a los establecimientos la seguridad, el fácil acceso y la comodidad que no consiguen en otros locales comerciales ubicados en la calle, y de esta forma, los comerciantes se sienten más confiados al invertir.

Incluso, personas que no están vinculadas al comercio, han adquirido franquicias, nacionales o extranjeras, de comida, ropa, calzado y hasta farmacias, como una forma de generar dinero sin necesidad de descuidar su verdadero oficio, ni dedicarle la totalidad del tiempo a un local atendido por uno o varios empleados.