Trabajos en las calles próximas a la Plaza Echaurren han marcado el primer año de tres que contempla la recuperación del sector. Se avanza lento y los vecinos aspiran a más seguridad
Autor: Angelo Salinas y Fabián Cárdenas
Diario Valparaíso’s Dolphins News, Escuela de Tripulantes y Portuaria Valpo. (Valparaíso)
Calles cortadas, sin tránsito, fue lo que acompaño el inicio del año escolar, luego en septiembre agua y barro del inesperado invierno, fueron las etapas vividas en medio de la reconstrucción del entorno histórico próximos a la Escuela en sus dos inmuebles ubicados en J.A.Vives y calle Clave del Sector Puerto. Los trabajos se iniciaron con la remoción de los antiguos adoquines, acumulándose cantidades de estos cubos de piedra, antiguo lastre de veleros provenientes de Europa. Esta vez interrumpiendo en las calles las vías de acceso para estudiantes, profesores y vecinos del sector. Cubrían todo el perímetro que comprenden las calles Clave, San Francisco, J. Vives y Santiago Severín, en dirección sur de la plaza Echaurren.
Obras esperadas, parte de un proceso por revitalizar el sector que se considera como uno de los más visitado por los turistas que llegan a la Ciudad Puerto ( Mercurio de Valparaíso, miércoles 9 septiembre 2015) y cuyo icono lo integra la plaza mencionada, el Mercado Puerto, el Edificio Astoreca inmueble patrimonial construido en 1907, toda una área que con el paso del tiempo y la inactividad se fue deteriorando. Barrio Puerto que busca hoy ser potenciado como sector comercial y responder a su condición de un nuevo polo turístico en una zona de conservación histórica. Un desafío muy relevante para un sector abandonado por muchos años, así afirmaba en una entrevista al Mercurio de Valparaíso, Gonzalo Gómez B., Ingeniero a cargo del programa recuperación de “Barrios Comerciales” impulsado por el Ministerio de Economía a través de SERCOTEC y del MINVU.
Vecinos del sector solicitan una Comisaría de Carabineros, según ellos, base para prosperar y poder atraer turistas
También Manuel Romero Herrera, representante de la Presidenta de la Junta de Vecinos del plan de esta zona patrimonial del Barrio Puerto señalaba que en los últimos 35 años nadie había hecho nada por el sector. También aportó otros antecedentes relativos a estos antiguos espacios de Valparaíso. En su condición de Vecino con más de 50 años, sus testimonios tienen sustancia, sobre todo al mencionar las causas del deterioro en los diferentes momentos de su historia. “Son varias las etapas vividas por este sector que se extiende desde Plaza Aduana hasta Plaza Sotomayor.
Hay que considerar que el Edificio Astoreca data de 1907 y fue residencia de sectores acomodados en aquellos años. Años más tarde la época de oro se vivió como consecuencia de la instalación de bares y burdeles que proliferaron en este barrio próximo al puerto, medio escondido pero cerca del centro, fue parte de la bohemia típica de un puerto internacional. Por los 70 del siglo pasado decayó y de ahí nunca más se levantó”. En los ochenta hubo una modernización, aparecieron los supermercados y las grandes tiendas, reemplazando las pequeñas tiendas del pasado cuando los vecinos se desplazaba caminando por estas calles y colmaban los espacios de la plaza y del antiguo Mercado Municipal. También en esta caída local del comercio local influyó la aparición de servicios de colectivos por los Cerros Cordillera, Mariposa, Mesilla y Toro restando clientes para el comercio establecido en los tradicionales almacenes de la Plaza, ya que sus habitantes optaron por ir a otros centros o barrios comerciales”.
Moreno Herrera también comenta:“ Tal vez se espera mucho de estas obras , pero los vecinos están desilusionados porque los trabajos todavía no se terminan en su primera etapa, a pesar que el programa inicial establecía como fecha de entrega el 27 de septiembre pasado, siendo el plazo de la remodelación de 3 años y hay retraso. Menciona como responsable de este atraso a la empresa contratista a cargo de ellos, falta exigir a los contratistas calidad y responsabilidad en la ejecución de los trabajos que se están a diario realizando en la calle. También comenta de una nueva aspiración de la comunidad, poder contar con una Comisaría de Carabineros, inquietud que ya se ha planteado a la Intendencia y Gobernación para frenar los niveles de delincuencia, sobre todo porque cada vez se nota la presencia de más visitantes en esta parte del plan y la prevención está siendo atendida por una patrulla de Carabineros que se estaciona en la Plaza Echaurren. La inquietud vecinal el señor Romero la ha hecho suya, incluso ha colaborado con la búsqueda de un terreno apropiado para la instalación de la Comisaría. Nos recuerda que por muchos años la Segunda Comisaría Central de Carabineros tenía su ubicación en el sector de la Matriz”.
Respecto a la presencia de la Escuela de Tripulantes y Portuaria de Valparaíso en el sector comenta “que la presencia de padres y apoderados de los alumnos dinamiza el comercio y esperamos que los jóvenes sean parte de las acciones complementarias que van de la mano con la cultura, conciencia y responsabilidad de los porteños, necesaria para hacer este barrio más acogedor para los turistas. Se entusiasta con el tema de la segregación de basura y estima que se debe aprovechar la presencia del cuartel municipal para solicitar apoyo en estas ideas.
También formula una crítica general a la juventud por esa necesidad de dejar sus testimonios con rayados inteligibles, lamentando lo observado en las fachadas del plan producto del descontrol durante la última “Fiesta de los Mil Tambores”, quedó todo en un estado penoso. Confidencia que pese a todo su interés desde la Junta de Vecinos no se pueda tener un mayor protagonismo y presencia para que los controles y acciones funcionen. Con todo, contar con una Comisaría en el sector será un segundo gran paso ya que el primero, pese a todos los inconvenientes ya se ha dado con el inicio de los trabajos”.
