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RESUMEN
En las ltimas dos dcadas muchas zonas urbanas en el centro de Mxico han sido afectadas
por hundimientos diferenciales del suelo. Generalmente estos procesos se han ligado solamente a la
sobreexplotacin de acuferos. En este trabajo presentamos los aspectos generales del fallamiento
en zonas urbanas y una descripcin de las fallas geolgicas de Morelia, Michoacn. En Morelia este
tipo de fenmeno inici en 1983, primero como grietas con desplazamientos casi imperceptibles, que
poco a poco evolucionaron hasta alcanzar una geometra de fallas de tipo normal con movimientos
diferenciales acumulados hasta de 100 cm. Sus direcciones varan de N30E a N80E y coinciden
con las del fallamiento tectnico regional. Los movimientos verticales en las fallas debidas a sobreexplotacin son de 4 a 6 cm anuales. Las zonas de influencia de las fallas, definida por el rea en
donde se observan daos a las obras civiles, puede ser en algunos lugares hasta de 5 m, dependiendo de la geometra de las estructuras. Desde 1983 estas fallas han afectado a un gran nmero de
construcciones, algunas de las cuales se han tenido que demoler. Tambin han daado obras de infraestructura como calles, tuberas de drenaje y de agua potable.
Entre las fallas de Morelia, dos son tectnicas y potencialmente ssmicas; ellas forman parte
del sistema de Morelia-Acambay en donde se han registrado eventos ssmicos en tiempos histricos.
Asociadas al escarpe de una de ellas existen zonas de inestabilidad en donde suceden movimientos
en masa. Las fallas geolgicas de la ciudad de Morelia, como en otras ciudades de Mxico (Celaya,
Quertaro, Salamanca, Irapuato, Aguascalientes, etc.), afectan a sectores de distintos estratos sociales, a zonas industriales, hospitales, colonias de escasos recursos y zonas de tipo residencial.
Palabras clave: fallas normales, fluencia, sismicidad, peligros geolgicos, Morelia.
ABSTRACT
During the last two decades differential ground subsidence has affected many urban centers in
Mexico. This process has been commonly related only to over-exploitation of subsurface water resources. In this work we discuss general problems of geological faulting in urban centers and we
present the description of faults in Morelia, Michoacn state. In Morelia, differential ground subsidence started in 1983 when ground gashes with very small displacement started to form. Subsequently these gashes evolved to form a network of normal faults that accumulated up to 100 m displacement. These faults trend between N30E and N80E and coincide with the orientation of regional tectonic faulting affecting the basin basement. The vertical displacement of these faults is 4 to
6 cm per year. The deformation zone affected by a single fault, estimated by the damage caused to
man-made structures, depends on the geometry of the fault and can be as wide as 5 m. Since 1983
faults affected a significant number of buildings, some of them to such an extend, that they had to be
demolished. Other man-made structures such as streets, drainage and water pipes were also damaged. Two of the faults recognized in Morelia are of clear tectonic origin and we considere them po-
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INTRODUCCIN
La parte norte del estado de Michoacn se caracteriza por una alta actividad ssmica y volcnica. En esta
regin, que pertenece al Cinturn Volcnico Mexicano
(CVM, Figura 1), han ocurrido algunos de los sismos
histricos ms violentos en el Centro de Mxico
(Garduo-Monroy et al., 1998) y existen ms de 1,000
volcanes monogenticos en lo que se ha llamado el campo volcnico Michoacn-Guanajuato (Hasenaka y Carmichael, 1985). Algunos de estos centros representan el
vulcanismo ms reciente en el CVM, que se manifest
histricamente en 1759 con la formacin del volcn Jorullo y en 1943 con el nacimiento del volcn Paricutn
(Luhr and Simkin, 1993, Silva-Mora, 1995).
Desde 1983, en la capital del estado de Michoacn,
Morelia, y en otras ciudades del norte y centro de Mxico, se empezaron a apreciar problemas de hundimientos
diferenciales a lo largo de trazas lineales, ocasionando
daos importantes en obras civiles (Martnez-Reyes y
Nieto Samaniego, 1990; Trujillo-Candelaria, 1985; Garduo-Monroy et al., 1999 y Lermo-Samaniego et al.,
1996). Dichos hundimientos definen trazas rectas en la
superficie con direcciones paralelas a sistemas de fallas
regionales. En la ciudad de Morelia las zonas daadas
son preferencialmente de direccin NE-SO, pero tambin se observan fallas con direccin E-O que estn generando problemas de inestabilidad de taludes
(Arreygue-Rocha et al., 1998, Arreygue-Rocha, 1999).
Suter et al. (1995) consideran que estas estructuras forman parte de la zona de falla Chapala-Tula con movimientos histricos, como los ocurridos en las depresiones de Chapala, Cuitzeo y Acambay en 1568 y 1912.
Desde 1984 investigadores de la Universidad Michoacana de San Nicols de Hidalgo (UMSNH) y del
Instituto Politcnico Nacional iniciaron el estudio de una
105
110
30
100
90
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Leyenda
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8
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Golfo de Mxico
20
Oc
a
no
15
Pla
de ca
Riv
era
Pa
cf
ico
Placa de Cocos
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Figura 2. Plano de Morelia con las fallas geolgicas ligadas a fenmenos de fluencia (Central Camionera, Chapultepec, Torremolino) y las
potencialmente ssmicas (La Paloma y La Colina). Sobresale la estrecha relacin que existe entre las direcciones de las fallas de la ciudad de Morelia
y las fallas regionales. Las partes sombreadas sealan la zona de influencia de las fallas. Tambin se observan las coronas de la inestabilidad de
taludes de la falla La Paloma.
serie de fallas que afectan a las obras civiles de las poblaciones de Santa Ana Maya, Tarmbaro y de la Ciudad
de Morelia (La Voz de Michoacn, 1988). En Morelia,
las zonas ms afectadas son las colonias Colina-Tres
Puentes y Avenida Hroes de Nocuptaro. Todas estas
estructuras geolgicas tienen direccin NE-SO, similar a
la de las fallas de la regin (Figuras 2 y 3). En 1988 se
haban identificado en la Ciudad de Morelia las fallas:
La Colina, Central Camionera, Chapultepec y La Paloma
(Figuras 2 y 3). Para 1993 el nmero de fallas aument a
cinco cuando se observ desplazamiento en la falla de
Torremolino. Hasta la fecha se han identificado dos fallas ms: Cuautla y Ventura Puente, las cuales iniciaron
su movimiento a finales de los aos 90.
En este trabajo se describen los estudios realizados
en las estructuras que afectan obras civiles en la ciudad
de Morelia, poniendo en relacin los datos geolgicos de
superficie y del subsuelo. De acuerdo a sus caractersticas agrupamos las fallas de Morelia en dos tipos: fallas
geolgicas que se han reactivado por la actividad humana y fallas tectnicas potencialmente ssmicas. Los daos
a las obras civiles de Morelia parecen estar asociados a
40
Tarmbaro
Km
ro
Falla de Tarmba
Cerro Quinceo
la
Fal
ina
Col
a
L
la
de
era
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m
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C
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Morelia
la
Fal
Falla de La Paloma
(Morelia-Acambay)
ina
Col
a
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Sta. Mara
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Fall
itos
Cerr
Falla Contzio
LEYENDA
Conos volcnicos
Depsitos de aluvin
Falla normal
Figura 3. Mapa geolgico de la zona de Morelia, donde se pueden observar las unidades correspondientes a la Sierra de Mil Cumbres y las unidades
del Cinturn Volcnico Mexicano. Tambin sobresalen las fallas regionales NE-SW y E-W, las cuales son paralelas a las estructuras que daan a la
mancha urbana. Hay que destacar que una gran parte de Morelia se localiza en zona de antiguos lagos, ahora cubiertos por depsitos de aluvin.
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de la ciudad de Morelia, lo que se interpreta como evidencia de una gran explosin lateral. Su edad no se conoce, pero se podra ubicar dentro del Mioceno ya que
subyace a los sedimentos lacustres del Mioceno
superior -Plioceno (Israde, 1995) (Figura 1).
Secuencia lacustre
Esta secuencia aflora en la parte sur de Morelia,
donde los pozos perforados han cortado espesores hasta
de 40 metros de depsitos fluviolacustres. A travs del
anlisis microscpico detallado de los sedimentos lacustres se observaron algas constituidas por un caparazn
silceo (diatomeas). Las especies presentes sugieren ambientes lacustres con tirantes de agua muy bajos. En el
sector norte de Morelia, la secuencia sobreyace a un basamento volcnico y est constituida por una alternancia
de arenas, gravas y limos. Todo est coronado por un depsito piroclstico de cada area, denominado
Alegra, que puso fin a la antigua zona lacustre de Morelia (Israde-Alcntara y Garduo-Monroy, 1999). Hacia
el sur, la secuencia se adelgaza pero conserva su aspecto
granular de tipo sacaroide. Culmina hacia arriba o lateralmente con limos de color caf que estn cubiertos por
depsitos volcnicos de cada area.
La secuencia lacustre presenta su ms completa exposicin en la regin de Charo, donde los fechamientos
radiomtricos en productos volcnicos indican una edad
Mioceno tardo a Plioceno tardo (Garduo, et al., 1997).
Sin embargo, los restos de un proboscidio, encontrados
en las excavaciones del edificio del Instituto Mexicano
del Seguro Social en la ciudad de Morelia, permiten inferir que esta secuencia lacustre puede extenderse hasta
el Pleistoceno (Israde-Alcntara et al., 1992; IsradeAlcntara, 1995 Israde-Alcntara y Garduo-Monroy,
1999).
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fueron encontradas estas impresiones de maz, se localiza en la misma zona donde estas lavas estn cortadas por
la falla de Tarmbaro de direccin E-O (Figura 1).
Aparentemente el movimiento de estas fallas sucede sobre la traza de fallas NE-SW preexistentes, ahora
cubiertas por sedimentos recientes y suelos. En este proceso de hundimiento, el fenmeno de fluencia y la deformacin diferencial son los que permiten que solamente
los sedimentos fluviolacustres se deformen, daando las
viviendas y las obras civiles. La fluencia consiste en una
deformacin continua en el tiempo en sedimentos previamente consolidados (Radbruch et al., 1966), que por
extraccin de agua sufren un cambio en la presin de poro y por consecuencia en su espesor, por lo cual se comprimen y se hacen ms delgados. Es importante reafirmar que este tipo de movimiento es assmico y no afecta
a la unidad estratigrfica subyaciente (i.e. ignimbrita de
Morelia) (Garduo-Monroy et al., 1999).
Falla de la Central Camionera
Esta estructura es la de mayor extensin en la zona
urbana y la que presenta un rasgo morfoestructural ms
claro. Tiene una direccin N60E, que puede seguirse
por varios kilmetros (Figuras 2 y 3). Su segmento ms
activo se localiza entre las instalaciones del IMSS y la
Av. Morelos Norte con geometra variable (Figura 2).
Dentro de este segmento se encuentran sectores donde la
traza de la falla es curva, lo que provoca la formacin de
pequeas estructuras tipo pull apart. Estas estructuras se
han identificado, de E a O en: la gasolinera La Colonial,
la Colonia Industrial, la fbrica Tron Hermanos, la Central Camionera y en las instalaciones del IMSS (Lmina
1, a y b). Esta geometra ha producido una zona de influencia de ms de 25 m en el sector NE, en tanto que en
el sector SO la zona de influencia no supera los 10 m. El
desplazamiento vertical de esta falla geolgica fue de
ms de 50 m, considerando la cima de la ignimbrita de
Morelia en el Centro Histrico y aquella cortada por los
pozos en la zona de Hroes de Nocuptaro. A principios
de los 80, se comenz a manifestar un hundimiento progresivo con mayor evidencia en la Central Camionera,
en la fbrica de aceites Tron Hermanos, en varias casas
habitacin y en la avenida Hroes de Nocuptaro
(Lmina 1, c y d). Tomando en cuenta el monitoreo que
se est realizando con testigos tanto en las calles como
en las viviendas y si se considera que el hundimiento inici en 1983 y que el desnivel mnimo actual es de 80 cm,
podemos suponer que su actividad es constante, con una
media de hundimiento de 5 cm anuales. Tambin en ese
periodo se da la tubera de la estacin de gasolina La
Colonial, donde se realizaron trabajos de remodelacin
en el muro oriental y en las oficinas. Una nueva reactivacin de la falla ocasion severos daos en noviembre de
1997; durante esta crisis la zona fue afectada por la presencia de productos inflamables en la red del drenaje.
Asimismo, se ha corroborado que esta estructura se encuentra debajo de las instalaciones del Seguro Social, las
cuales han sufrido y continan sufriendo daos constantes. Para construir la torre del IMSS, se hicieron algunas
perforaciones con la finalidad de conocer las caractersti-
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Figura 4. Comportamiento del desplazamiento vertical de las fallas en la Ciudad de Morelia, basado en nivelaciones topogrficas y de testigos
(Fotografa 2). Destacan dos periodos de colapsos importantes y en corto tiempo, stos corresponden a la presencia de los dos fenmenos de El Nio-La Nia ms grandes en la historia (1983-1984 y 1997-1998). Entre estos dos eventos mayores, el hundimiento est ligado principalmente a la
geometra de las fallas geolgicas preexistentes y al fenmeno de fluencia o creep
Falla Chapultepec
Es una estructura que tiene escasa expresin morfolgica, por lo que su existencia ha despertado controversia; hasta ahora su traza se ha seguido por aproximadamente 1,300 m. con una direccin NE-SO y con un
desnivel de 50 cm hacia el SE. Desde el puntos de vista
geofsico, su expresin es clara tanto en los estudios
geoelctricos, gravimtricos como de georradar.
Esta estructura afecta a ms de 40 casas habitacin
de tipo residencial, un edificio de condominios, el Seminario Claretiano, una escuela pblica, varias calles y avenidas. Inicialmente se consider que el dao en las casas
se deba a arcillas expansivas y a la extraccin de agua
que se lleva a cabo en el pozo del Boulevard Garca de
Len (Telfonos de Mxico). Sin embargo, los primeros
trabajos geolgicos y geofsicos han revelado que se trata de una zona lineal orientada NE-SO. En esta rea existen casas que han sido reparadas hasta tres veces en el
perodo comprendido entre 1983 y 1990; a la fecha nuevamente se encuentran fracturadas. En los ltimos tres
aos la falla se ha propagado en direccin SO, daando
nuevas zonas urbanas.
Actualmente el extremo NE de la falla termina en
la interseccin con la avenida Lzaro Crdenas y hacia el
SO sobrepasa el Boulevard Garca de Len y sigue hasta
la colonia El Empleado. En resumen, esta falla afecta a
una parte de las colonias Chapultepec Oriente, Chapultepec Sur y El Empleado (Figura 2).
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Lmina 1. a y b. Fracturamiento del piso de una casa que muestra la formacin de una zona de transferencia donde se genera un pull apart. Este tipo
de estructura se est desarrollando en la zona de la central Camionera, donde las zonas de transferencia hacen aumentar la reas de influencia de las
fallas. En b se puede apreciar cmo es ms ancha la zona de daos.
c y d. Testigo colocado en la falla de la Central Camionera en 1983. En su inicio las dos lminas se colocaron paralelas, ahora se puede constatar un
desplazamiento efectivo de ms de 30 cm en la obra civil.
e y f. Casa daada de 1983 (e) a 1995 (f) por la falla La Colina. Se puede apreciar cmo la estructura se va hundiendo hacia el lado izquierdo (NW).
Estas fotografas hacen ver el grado de hundimiento que han y estn sufriendo las viviendas a lo largo de estas estructuras. Servir para estimar si es
oportuno reconstruir una nueva vivienda o dar otro uso al terreno.
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Figura 5. Sondeos realizados para las obras civiles del IMSS. En ellos se puede apreciar el desnivel de ms de 10 m en la cima de la ignimbrita
Morelia, lo que sugiere la presencia de una falla geolgica, visible por los cambios de topografa, pero seguramente sepultada por material reciente.
Esta misma estructura fue observada en las secuencias fluviolacustres de la avenida Hroes de Nocuptaro, con desplazamientos de hasta 3 m.
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SE
Villalongin
El Realito
B. Garca de Len
Ro Grande
Pozo 3
Pozo 18
Pozo 10
Pozo 76
Pozo 31
Pozo 75
1800
120 m
152 m
Falla La
Paloma
153 m
tepec
Falla Chapul
Msnm
1850
Falla Centr
al Camioner
Falla La C
olina
1900
160 m
1750
230 m
Leyenda
Sedimentos recientes
Sedimentos fluvio lacustres del Mioceno Sup.-Pleistoceno
300 m
Figura 6. Perfil norte-sur de la Ciudad de Morelia, donde con la informacin derivada de la perforacin de los pozos para agua se ha configurado el
comportamiento de las ignimbritas del Mioceno (Cantera de Morelia). Se observa con mucha claridad que fallas como La Paloma y Central Camionera tienen una gran expresin en el subsuelo.
fundas de la placa que subduce (sismo de 1858 de Morelia-Ptzcuaro, con profundidad estimada de ms de 30
km) o bien ligados a fallas geolgicas que se generan en
la corteza de la placa superior (sismo de Maravato de
1979 y 1999, con profundidades menores a los 30 km).
Estos ltimos sismos pueden ser sentidos con mayor intensidad y su recurrencia es superior a 1,000 aos (Suter
et al., 1995). Estn asociados a fallas con direcciones EW (e.g. Pajacuarn, Cotija, Tarmbaro, La Paloma, etc.),
que forman parte del sistema Chapala-Tula o MoreliaAcambay (Pasquare et al.,1991; Suter et al., 1992, Suter
et al., 1995; Johnson, 1986; Martnez-Reyes y NietoSamaniego, 1990).
En la regin de Morelia, las fallas que pueden asociarse a este ltimo tipo son La Colina, Tarmbaro y
los segmentos del sistema de fallas de Acambay-Morelia
como La Paloma, Cerritos y Contzio. A continuacin se describen las fallas La Paloma y La Colina, por
ser las que se encuentran afectando a la zona urbana de
Morelia. Es importante tambin sealar que se han venido monitoreando estas fallas desde el inicio de 1999 y no
se ha encontrado actividad microssmica en ellas.
Falla La Paloma
Al sur de la ciudad de Morelia se encuentra la mesa
de Santa Mara, formada por la Ignimbrita de Morelia.
Entre esta mesa y la depresin de Morelia existe un desnivel de ms de 200 m, provocado por una falla de direccin E-O que hemos llamado La Paloma. El escarpe de
la falla La Paloma tiene una expresin sobresaliente
hacia el oriente mientras que su altura va disminuyendo
hacia el poniente. La falla forma parte del denominado
Sistema activo de fallas Morelia-Acambay. Este sistema es responsable de varios sismos que han afectado
principalmente a los estados de Michoacn y de Mxico.
En la zona de Acambay, las fallas del mismo nombre
fueron responsables del sismo de 1912, con una magnitud de 6.9. En el segmento de Venta de Bravo (AstizDelgado, 1980; Suter, et al., 1992; Suter, et al., 1996) se
han presentando recientemente una serie de eventos ssmicos que han afectado la regin de El Oro y Tlalpujahua. Flores (1920), en su trabajo sobre la regin de Tlal-
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pujahua, escribe sobre los movimientos ssmicos que sinti en el interior de las obras mineras de esa zona. En
1979 el poblado de Maravato fue sacudido por un sismo
de 5.3 en la escala de Richter (Astiz-Delgado, 1980), el
cual tuvo un impacto muy grande en la poblacin de Maravato y sus alrededores. Otros sismos de los que se tienen datos se presentaron entre Maravato y Tlalpujahua
en 1734, 1735 y 1853-1854 (Suter, et al., 1992, 1996).
En 1845 y 1872 la regin de Los Azufres sufri una serie
de crisis ssmicas que provocaron que la poblacin civil
pidiera apoyo a las autoridades para este tipo de fenmenos (Urquiza 1872; Ramrez y Reyes 1873). Tambin es
importante sealar que en 1845 y 1858 la ciudad de Morelia fue afectada por dos sismos cuya magnitud fue ms
all de los 7 grados de magnitud (Singh, et al., 1996;
Jara et al., 1994).
Al sur de Morelia, en el escarpe de Santa. Mara,
las fallas E-W dan lugar a varios desniveles, que son evidentes por formar escalones de ignimbritas (Cantera de
Morelia), los cuales estn asociados con pequeos deslizamientos del terreno (Figura 7). En el sector suroriental
de la ciudad se pueden observar anillos de deslizamientos en masa, que pueden estar relacionados con sismos y
que han provocado la inestabilidad en esos taludes. El
libramiento sur de Morelia est afectado por esta problemtica. En observaciones recientes se encontraron a lo
largo del escarpe de Santa Mara fracturas de ms de 3 m
de ancho por 3 m de profundidad, que se pueden seguir
por varias decenas de metros. Dichas fracturas son paralelas a la falla E-W (Arreygue et al.,1998 y ArreygueRocha 1999).
Al observar cualquier fotografa area de la zona
de Morelia se puede constatar como la zona de influencia de la falla La Paloma es mucho ms importante que
la de los segmentos vecinos (Contzio, Cerritos, guilas). Los rasgos morfolgicos ms espectaculares de coronas ligadas a inestabilidad se encuentran en las ignimbritas ms soldadas. Cuando ellas no estn presentes, las
coronas y los cuerpos inestables casi no estn presentes.
Por los rasgos morfolgicos, la estratigrafa (con niveles
poco soldados en la base), por la escasa alteracin de la
ignimbrita, por la geometra de las fracturas y por las
Figura 7. Talud de la falla La Paloma. Se pueden apreciar con bastante claridad los bloques movidos, aparentemente asociados a eventos ssmicos.
48
Zona de vaciado
49
Fisuras del
Coronamiento
Corona
Lado
derecho
Zona de acumulacin
Escarpe
Principal
Cabeza
Escarpe
Secundario
Fisuras
Transversales
Grietas
Radiales
Superficie de
deslizamiento
Material
suelto
Cuerpo
principal
Pie
Superficie de
separacin
Margen
inferior
forma una contrapendiente en las lavas del Cerro Quinceo hacia el SW. En las construcciones del Infonavit Manantiales, la falla La Colina pone en contacto a sedimentos lacustres con lavas del Cerro Quinceo, que tuvo actividad holocnica (Martnez y Hobson, 1907). Los daos
iniciales se manifestaron en cinco casas dplex del Infonavit La Colina, las cuales fueron demolidas debido al
fracturamiento intenso que ocasion el hundimiento y a
50
horizontal con los sedimentos lacustres. Por este contraste de materiales se podra pensar que la zona de hundimiento tendra que producirse hacia los sedimentos lacustres, es decir hacia el sur. Sin embargo, los que se estn hundiendo son los basaltos, que seguramente descansan sobre el material lacustre.
Se considera que esta falla es ssmicamente activa,
debido a que est cortando a lavas donde se han encontrado restos de mazorcas, que evidencian su edad histrica (Figura 10).
En resumen, esta estructura presenta un hundimiento con una tasa de movimiento vertical de 4 a 6 cm
anuales (creep). Su zona de influencia es variable, siendo
en la zona de Tres Puentes-La Colina de 20 metros a ambos lados de la falla, de 15 m en Las guilas, Lpez Mateos y Agua Clara y de 20 m en la zona de Manantiales.
Es muy importante resaltar que, en la zona de Manantiales, la zona de influencia de la falla puede ser mayor que
lo hasta ahora observado hacia el sur de la traza de la falla actual, ya que se han detectado dos estructuras, una
pequea que ya comenz a deformar el libramiento poniente y otra en la base del montculo de Ignimbrita Morelia localizado sobre el libramiento y que representa la
falla geolgica principal, provocando que la cantera se
hunda a ms de 20 m.
Tambin es importante sealar que estudios geolgicos, geofsicos y geotcnicos realizados por la empresa
Colinas de Buen corroboraron la existencia de esta es-
Figura 9. Fotografa area de los aos 60 del sector de la falla La Colina. Se puede notar que la falla era bastante evidente antes de que la mancha
urbana llegase a esta zona.
tructura geolgica, y sugirieron al Infonavit la demolicin de 43 viviendas. Hasta ahora los daos causados por
esta estructura se estiman en ms de 12 millones de pesos, ya que se han demolido 53 casas de Infonavit (La
Colina, Manantiales). Esta estructura se prolonga hacia
el NE y hacia el SW; en ambas direcciones la zona urbana sigue creciendo, por lo que debe ser considerada su
traza en los nuevos planes de desarrollo urbano para evitar perdidas de recursos.
DISCUSIN
Sin duda alguna el estudio de las fallas en zonas urbanas ha generado fuertes discrepancias entre los especialistas en ingeniera civil y en geologa. Sin embargo,
antes de cualquier discusin debemos entender que cualquiera que sea el calificativo utilizado (falla, grieta, fractura, etc.) lo ms importante para enfrentar el problema
es reconocer que es un fenmeno geolgico acelerado
por obras antrpicas, que genera grandes daos a todas
las obras civiles que son afectadas por ellas.
Independientemente de las discusiones de concepto, es muy claro que en la ciudad de Morelia, as como
en muchas zonas urbanas afectadas por fallas geolgicas
con fenmenos de falla-fluencia, los efectos son graves y
deben ser considerados en los planes de desarrollo urbano y en los reglamentos de construccin.
Tambin es importante sealar que este tipo de daos provoca un debilitamiento en las obras civiles, efecto
que en caso de conjugarse con la gravedad (sobrepeso de
la vivienda y torsin) o con la ocurrencia de un sismo
51
Figura 10. Impresiones de mazorcas en las lavas del flanco oriental del volcn Quinceo. Este ejemplar se localiza en el Museo del Estado de Michoacn, sito en Morelia..
52
CONCLUSIONES
En Morelia existen dos tipos de zonas vulnerables
relacionadas con fallas geolgicas:
a) Zonas donde existen fallas geolgicas anteriores al establecimiento de la zona urbana, pero que por
obras antrpicas se han reactivado con movimientos de
fluencia (creep) en las secuencias fluviolacustres, y con
tasas de movimiento de 4 a 6 cm anuales.
b) Zonas en donde existen fallas que pueden ser
consideradas como potencialmente ssmicas por tener
desplazamientos durante el Holoceno y por sus caractersticas morfolgicas, y que adems estn relacionadas
con movimientos de fluencia (La Colina) o a inestabilidad de taludes (La Paloma).
De acuerdo con las normas de La Comisin Reguladora de Energa Atmica de Estados Unidos y los estudios realizados en la regin de Morelia, las fallas La Paloma, La Colina y Tarmbaro pueden ser consideradas
como fallas ssmicamente activas, es decir que muestran
actividad de movimiento en los ltimos 35,000 aos. Las
dos primeras estructuras se encuentran dentro de la zona
urbana, lo que aumenta el factor de vulnerabilidad, debido a que afectan a viviendas, edificios pblicos, redes
hidrulicas, drenajes, lneas elctricas y calles.
Es muy importante reconocer que la sobreexplota-
AGRADECIMIENTOS
Proyecto realizado con fondos CONACYT
(471100-5-28764T) y con recursos de la Coordinacin
de la Investigacin Cientfica de la Universidad Michoacana de San Nicols Hidalgo. Tambin queremos agradecer infinitamente a Gerardo Garca, Ada Lpez, J. L.
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