«La gente joven se echa para atrás, no quiere seguir con las explotaciones de sus familias porque éstas dan mucho trabajo. Además, a veces no compensa. Por ejemplo, el precio de la leche estuvo 10 años estancado, mientras que a nosotros sí nos subían los precios de productos como el pienso», explica Belén Alonso. Por eso, su familia ha cambiado su ganadería por los apartamentos Casa Cristo (en Villadun, Castropol).

«Cuando nosotros empezamos con el turismo rural, había muy pocos que lo hacían, pero ahora ya son muchos los ganaderos que han optado por esta alternativa», asegura. Y afirma que la única salida para la gente joven es meterse en una cooperativa, donde los ganaderos se turnan para trabajar.

9.000 ganaderías menos

Los datos corroboran esta tendencia. De las 32.575 explotaciones ganaderas que había en Asturias en 1998, se pasó a 23.192 en 2006. Por tanto, en sólo 8 años se ha perdido el 28,80% de las ganaderías (9.383 menos) y, con ellas, 63.104 reses.

En el mismo periodo de tiempo, los establecimientos hoteleros se han duplicado, pasando de 332 en 1998 a 662 en 2006. Y la tendencia sigue al alza, puesto que el año pasado se abrieron en Asturias 43 hoteles nuevos, con los que las plazas hoteleras ya son 26.916, 11.780 más que en 1998. La región se está transformando.

Han preferido el turismo rural

Belén Alonso. 29 años.

«El turismo rural es menos esclavo»

Hace 8 años que José Antonio Alonso y su mujer, María Ofelia Fernández, decidieron compaginar su actividad ganadera con el turismo rural, y abrieron los apartamentos Casa Cristo. Hoy, José Antonio ya se ha jubilado y con él, la explotación. «Yo me voy a hacer cargo de los apartamentos cuando mi madre se jubile, pero con la ganadería no quería seguir. Se gana más con el turismo rural y es menos esclavo», reconoce su hija Belén.