La Sociedad Andaluza de Herpetología y Terrariofilia (SAHT) es una asociación sin ánimo de lucro que tiene como fin la unión de todos los seguidores de esta afición, tanto con fines de defensa de nuestros derechos e intereses, como para el ocio y disfrute de nuestro hobbie común.

Desde SAHT se lleva a cabo toda una labor divulgativa e informativa, que trata de mostrar la realidad de nuestra afición ante una sociedad que desconoce nuestro entorno y que sigue viendo la herpetología y terrariofilia con un cierto alarmismo, como así se demuestra con la aprobación de una serie leyes (ya vigentes o previstas) en las que no se tiene en cuenta la verdadera realidad de nuestro sector.

SAHT tiene entre sus fines velar por los intereses de nuestros socios en particular y de nuestro colectivo en general, y para ello está movilizando sus efectivos y luchando legalmente para una regulación jurídica sensata y lógica, que permita disfrutar de esta afición con garantías para todos.
Igualmente, entre los objetivos de SAHT se encuentra el estudio y la difusión científica, así como la realización de toda una serie de actividades (salidas a la naturaleza, viajes, encuentros, etc.) para sus socios.

Como colectivo de profesionales y aficionados a la terrariofilia de Andalucía y España, y en representación de los mismos, los miembros de la Sociedad Andaluza de Herpetología y Terrariofilia, sentimos desde hace tiempo la necesidad de regular correctamente la tenencia de ciertos animales exóticos susceptibles de ser considerados potencialmente peligrosos, tales como reptiles, anfibios y artrópodos, tras el alarmante crecimiento de un número determinado de personas irresponsables que adquieren estos animales sin el nivel suficiente de conocimientos para mantenerlos y hacerse cargo de ellos responsablemente.


Ante esta situación:

  • Se ha colaborado activamente con la Junta de Andalucía durante el proceso de revisión y creación del borrador de este Decreto

  • Hemos aportado nuestros conocimientos científicos y experiencia práctica en el trato con este tipo de animales a la hora de determinar cuáles de ellos podrían suponer un peligro real y cuáles no presentan peligrosidad para la sociedad o el medio ambiente.

  • La Junta de Andalucía ha tenido muy en cuenta las indicaciones que se han aportado desde la SAHT, y así ha quedado reflejado en el texto del Decreto.
     

  • En breve la SAHT comenzará a trabajar estrechamente de nuevo con la Junta de Andalucía en la elaboración de la Orden que regule este Decreto, pudiendo así completar aquellos puntos menos definidos que en él existen, tales como:

    • La limitación de 2 kg de peso no es determinante para definir la peligrosidad de un animal (por ejemplo una tortuga superará fácilmente esta limitación y no puede considerarse peligrosa en modo alguno)

    • Queda pendiente concretar qué se consideran daños para la integridad física de una persona, puesto que la mordedura o arañazos de un gato suelen ser más peligrosos que cualquiera de las consecuencias de sufrir mordeduras de la mayoría de animales exóticos que se mantienen en casa.

    • Así mismo será necesaria la elaboración de una lista de especies que se consideren invasoras del medio ambiente.

     

  • Nos posicionamos completamente en contra del comercio de especies invasoras para el medio ambiente andaluz, por lo que aplaudimos que se haya incluido este aspecto en el Decreto, como así sugerimos desde la SAHT en la reunión mantenida con la Junta de Andalucía.

  • Creemos justa y necesaria una regulación de nuestro colectivo para evitar que personas sin la suficiente preparación o conocimientos puedan cometer delitos contra el medio ambiente, la sociedad o los propios animales.

  • Igualmente, el colectivo de aficionados a la terrariofilia sentimos la necesidad de ser reconocidos y diferenciados de la creciente masa de personas que, por mero capricho o moda, adquieren algunos de estos animales sin la suficiente preparación.
     

  • Nos sentimos afortunados de poder disfrutar de una ley innovadora, reguladora y no prohibitiva, que sienta precedentes en el territorio nacional y que se encuentra el nivel de otras leyes similares de la Unión Europea.