Polvo de estrellas

La vida de una persona es como un océano,  hay experiencias que tienen tanta o más profundidad que las fosas abisales, otras que son como olas que vienen, besan la orilla de las playas y retornan a la mar, para volver en un ciclo sin fin como si de un péndulo de Foucault se tratasen. En mi vida ha habido momentos profundos, momentos donde he penetrado titánicamente en las cosas hasta que estas han formado parte de mi ser existencial. También ha habido olas, experiencias que me han gratificado durante unos instantes, pero que no he tenido la osadía de zambullirme hasta las últimas consecuencias. Si ha habido una ola recurrente en mi vida esta ha sido la astronomía, me considero un astrónomo frustrado, no se si es porque no me veía capaz o porque rayos fue, pero acabé licenciándome en informática y no en astrofísica.

Cuando estudiaba EGB era, lo que se puede decir, un mal estudiante, estaba más por el juego y mis fantasías que por las clases, hasta que un día pusieron un examen de astronomía, fue el mejor examen que hice en todo el EGB, sino recuerdo mal obtuve una calificación de 9,75. No está nada mal para alguien que estaba acostumbrado a aprobar con cincos pelados casi siempre en la repesca. Contesté las preguntas no tal como estaban en el libro de la asignatura de ciencias naturales sino del modo que las había aprendido de los libros de astronomía que leía en casa. Después de aquel examen la profesora Guadalupe, todavía recuerdo su nombre, me miraba con otros ojos, y en el viaje de fin de curso estuve mirando con ella las estrellas, en el Vall de Boi. Tengo muchas cosas que agradecer a mis padres pero una muy importante es su esfuerzo por alimentar mi curiosidad, su energía para que adquiriera interés por las cosas. Creo que el mejor profesor que tuve en la época de EGB no estuvo nunca en una de las clases, fue mi padre que nos llevaba a mil sitios para enseñarnos las maravillas del mundo, entre ellas las maravillas del firmamento. Recuerdo aquellas noches de verano con mis padres y tíos mirando el cielo estrellado de Tarragona durante horas, contando las estrellas fugaces que veíamos, y observando los planetas por el único telescopio que he tenido hasta ahora. Un telescopio que me regaló mi padre después de aprobar octavo de EGB, el telescopio había significado el revulsivo para salvar un curso que estaba bastante cuesta arriba porque no mostraba ningún interés en las clases. También recuerdo los capítulos de COSMOS de Carl Sagan, que nunca me perdía y que años después pude coleccionar para disfrutarlos de nuevo de vez en cuando.

Firmamento

Así ha habido olas de estrellas en diferentes épocas que han hecho que volviera mi interés por la astronomía. En los primeros años de mi carrera en informática quise fundar una asociación de astronomía en la universidad que nunca llegó a buen termino, también mandé una solicitud para trabajar en verano en el Instituto de Astrofísica de Canarias como técnico en tratamiento de imágenes astronómicas aunque no fui elegido, eran mis primeros años en la facultad y no cumplía los requisitos que necesitaban, quizás llegó demasiado pronto. Luego pasó tiempo sin que me acordase de mi ola, hasta que volvió el año pasado, no se si para quedarse para siempre conmigo o para irse una vez más. El año pasado contacté con gente para volver a fundar una asociación por mi comarca, finalmente los conocí a principios de este año aprovechando un eclipse de luna que pudimos ver desde el observatorio de Pujalt, un pueblecito del Alto Anoia. Lo pasamos fantásticamente, después de muchos años pude disfrutar de nuevo de un telescopio, incluso pudimos ver los anillos de Saturno. Este verano me fui con mi familia a una casa rural en Vallcebre que tenía un observatorio astronómico. Era una casa magnífica con unos dueños encantadores, sobre todo Isidre. Con sus clases magistrales nos demostró que era un experto en astronomía y que realmente amaba su afición. Pudimos ver galaxias (por primera vez vi a la galaxia Andrómeda, también llamada M31 según el catálogo de Messier), cúmulos globulares, nebulosas, incluso a Júpiter, nuestro gran cancerbero de meteoritos y cometas, también vimos sus cuatro satélites más visibles.

Sistema Solar

La ciencia del firmamento para mi es algo increíble, nunca me hago tantas preguntas como cuando apunto mis ojos hacia la gloria estrellada. Preguntas muy trascendentales, algunas quizás tendrán respuesta en el futuro, otras posiblemente no la tengan nunca o simplemente no entienda la respuesta. Me pregunto como se formó el universo, como se formó nuestro sistema planetario, tengo tantas preguntas sin respuesta. Muchas teorías aceptadas por consenso que son el resultado de un planteamiento hipotético-deductivo. Algunas teorías serán demostradas por las observaciones y los experimentos, otras rechazadas, y otras posiblemente nunca pasen la frontera de la conjetura.

El universo está lleno de regularidades. Por ejemplo la teoría que explique la formación de nuestro sistema planetario tiene que ser capaz de explicar cuatro rasgos fundamentales de nuestro sistema:

  • Las regularidades orbitales: Todos los planetas ocupan aproximadamente el mismo plano orbital.
  • Casi todos los planetas, a excepción de Neptuno y Plutón, están situados a distancias regulares del Sol en una curiosa ley que es llamada Ley de Titius-Bode. Esta ley dice que la distancia r de un planeta en posición n respecto del Sol sigue la siguiente ley:  r = 0.4 + 0.3*2(n-1). Pero lo alucinante es que no acaba ahí, esta ley sigue siendo valida, hasta cierto punto, incluso en el caso de la distancia de los satélites a sus planetas.
  • Los planetas interiores tienen masas pequeñas y una densidad alta, mientras los planetas exteriores tienen grandes masas y densidades bajas.
  • En último lugar, pero no menos importante, tenemos que el 98% de la rotación del sistema planetario, también llamado momento angular, se concentra en los planetas y satélites, mientras que casi toda la masa del sistema se concentra en el Sol. Es decir el Sol tiene un momento angular del 2% y una masa del 99% en relación al sistema completo.

Han existido muchas teorías que intentaban explicar la formación de nuestro Sistema Solar pero los recientes descubrimientos de planetas y de discos protoplanetarios  fuera de nuestro sistema han aportado nuevos datos a los cosmólogos. De todas las teorías actuales parece que la más aceptada es la de que después de producirse la contracción de la nube que origina una estrella se forma un disco protoplanetario o discos de acrecimiento (estructura en forma de disco alrededor de un objeto central masivo) en el que se irán condensando protoplanetas hasta formar los planetas definitivos.

Protoplanetas

Ahora espero que la ola del océano cósmico permanezca en mi, y a lo mejor algún día puedo llegar yo mismo a algunas de las respuestas, o ser yo mismo, tu mismo, amigo lector, la respuesta a todas mis preguntas, porque éramos pedacitos de estrellas que caímos del cielo para quedarnos en este planeta azul, polvo de estrellas que adquirimos consciencia y fuimos capaces de hacernos preguntas como las que yo me hago en esta noche de recuerdos y melancolía.

8 comentarios sobre “Polvo de estrellas”

  1. Me ha gustado mucho este escrito. Ciertamente tu padre te ha influido mucho en tu personalidad actual y es que es una persona estupenda que supo despertar en ti algo muy valioso, la curiosidad. Me da pena el nunca haber visto una estrella fugaz, seguramente es que no he mirado demasiado el cielo. En vallcebre tuvimos una buena oportunidad por los medios que teníamos pero no acompañó el tiempo.

    Quizá este invierno podamos escaparnos algun fin de semana para ver cosas que quedaron pendientes.

    Lo dicho, me ha encantado

  2. Hola David! que bien te lo montas tio. El tema este de los astros creo que poca gente lo tiene en cuenta. Está desviado de nuestro campo visual cotidiano y es un tema a mi parecer muy poetico en el sentido de que no podemos experimentarlo fisicamente (solo podemos observarlo) Aun no esta en nuestro alcance surcar el eter para vivir empíricamente lo que eso supone. Solo hay hipótesis y estudios de eruditos que aunque fascinante sigue siendo desconocido y complicado.
    Yo miro las estrellas como un analfabeto cósmico y a veces de esos puntos luminosos obtengo recuerdos, ideas o sentimientos de esta vida terrenal, como quien mira al mar sin haber navegado. Yo desearía que el misterio perdurara, pues una vez acabado el misterio, tal vez se acabe el amor…
    besos para los tres. Richi

  3. Gracias por los comentarios Richi. Yo tampoco soy un entendido en la materia, pero te aseguro que no hace falta viajar a las estrellas para conocerlas y quererlas. Y de verdad de la buena que el amor, la inteligencia y la energía siempre van cogidos de la mano.

    Oye, a ver si nos explicas más cosas de la mar en tu blog, tu eres de los que miran a la mar habiendo navegado.

    Besos

  4. me gustaria que publicaran mas detalles del universo uno de ellos es en la imagenes
    tambien me gusta mucho su pagina porque explican bien acerca del universo espero que sigan asi y mil gracias

  5. ay que es esto bueno mejor no digo nada bay los quiero cacanas cagadas ay que es esto bueno mejor no digo nada bay los quiero cacanas cagadas ay que es esto bueno mejor no digo nada bay los quiero cacanas cagadas
    ay que es esto bueno mejor no digo nada bay los quiero cacanas cagadas

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