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Entre el régimen del 78, el sistema judicial, la familia real, el Opus Dei y el franquismo han conseguido convertir España en un desastre de país, donde mediante juicios farsa se condena a penas de prisión a quien no ha cometido delito alguno mientras políticos corruptos que han robado millones están tranquilos en su casa con el dinero robado, en que la eficacia no se valora y se premia el error.

Solo faltaba que el ex monarca Juan Carlos de Borbón, que gracias a la prensa extranjera los españoles se han enterado de que es sumamente corrupto, ladrón y obseso sexual, cuando lo ha sido siempre, desde antes de acceder al trono, huyese de España con paradero desconocido con la ayuda del Estado y la corona, con lo que han demostrado definitivamente que España tiene tanto de democracia y Estado de derecho como la China, que la Ley no es igual para todos, que el Poder Judiciales hoy día es tan independente como lo era en época de Franco. Lo que justifica totalmente a Xavier Sala i Martin cuando afirma que España es el hazmerreír de Europa y los países serios y civilizados. Como siempre ocurre en España, la barbaridad de la huida de Juan Carlos de Borbón ha provocado un alud de comentarios parecido a un concurso para ver quien suelta la bárbara estupidez más gorda

Por supuesto, la pocilga mediática madrileña defiende la postura del ex rey y del Estado, resaltando la honestidad de Juan Carlos, que se mantiene a disposición de la justicia española, pero ocultan un factor fundamental: Juan Carlos de Borbón no está huyendo de España sino de Suiza, porque los mismos que le han ayudado a escapar nunca le detendrán, juzgarán y mucho menos condenarán, mientras en Suiza el fiscal Yves Berossa trabaja en un expediente contra Juan Carlos que podría darle un gran disgusto.

Y por eso no es ninguna sorpresa que de los tres países donde se dice que Juan Carlos ha estado, dos de ellos, Republica Dominicana y Abu Dabi no tienen acuerdo de extradición con Suiza, y seguro que la mayoría de los que visitará en el futuro tampoco tendrán tal acuerdo  

Al tiempo que el propio Estado ayudaba a Juan Carlos a huir, España recibía un nuevo bofetón de la Justicia europea cuando el juez de Bruselas dicto sentencia sobre la euroorden del antiguo Conseller de Educación Lluis Puig, y no se limito a denegar la extradición, además criticó duramente el método utilizado y negó que el Tribunal Supremo tenga capacidad para tal juicio.

La mayoría de políticos españoles se contradicen solo con abrir la boca. Desde que ayudó a huir a Juan Carlos, Pedro Sánchez ha manifestado repetidamente desconocer su paradero, pero su ministro del Interior Grande Marlaska tuvo que reconocer que 15 agentes y un coronel se encargan de su seguridad, pero insistió en que él desconocía donde se encontraba el emérito. Para leer estás dos declaraciones juntas los españoles deberían reflejar en su cara el mayor grado de suma estupidez.posible.

Lo que llamo la pocilga mediática madrileña es el método utilizado por los propietarios de España para mantener engañados a los ciudadanos, mezclando noticias ciertas con inmensas falacias y difamaciones, métodos utilizados sobre todo en relación con Catalunya, pero también en otros asuntos.

Todos los periódicos de la pocilga practican el método, unos más que otros, El País probablemente el que menos, y los que se llevan la palma son La Razón y especialmente el ABC.

ABC ha publicado gran cantidad de falsedades referidas al independentismo catalán y otros como Podemos y el gobierno de Pedro Sánchez y dispongo de un muy buen ejemplo de su asquerosa manera de actuar.

Hacia la mitad de 2018 se inició la persecución de los CDR bajo la acusación de terrorismo y tenencia de explosivos, varios de ellos fueron encerrados en prisión preventiva, todo ello en base a uno de los casos de pruebas falsas, inventadas por la Guardia Civil.

Hoy ya no queda ninguno acusado de terrorismo, y si todavía queda algún CDR en la cárcel no es bajo acusación de terrorismo y si todavía están en prisión es porque cuando se trata de independentistas el Estado español es sumamente rápido metiéndolos en prisión y desesperantemente lento en ponerlos en libertad.  

Una vez comprobado judicialmente que los CDR ni son terroristas ni usan explosivos, mirad la vomitiva portada del ABC del 2 de noviembre 2019 cuando estaba en su apogeo la detención de miembros del CDR bajo la falsa acusación de terrorismo.

La vergonzosa portada muestra la foto de un CDR en plena manifestación, con llamas al fondo probablemente debidas a un container incendiado y un texto que informa que los CDR tienen un borrador para reivindicar atentados similar a los de ETA, y añaden que la Guardia Civil intervino un manuscrito que lo demuestra, cuando todo ha salido de las sucias, asquerosas e indecentes cabezas de los ¿¿periodistas?? de ABC.

Por cierto, ¿alguien puede imaginarse un país serio, democrático y Estado de derecho donde el principal cuerpo de policía presentase ante el juez pruebas falsas fabricadas por ellos mismos? Con toda probabilidad el escándalo sería descomunal y provocaría una depuración a fondo del cuerpo policial. En España no va a ocurrir nada de nada, excepto que vuelva a darse la increíble barbaridad que un cuerpo policial presente pruebas falsas.

¿Alguien puede dar alguna explicación creíble a los siguientes hechos?. Resulta que en Madrid ingresan bastantes más enfermos de coronavirus en la UCI que en Catalunya, y sin embargo las estadísticas de contagios del virus son muy inferiores a las de Catalunya. El F.C. Fuenlabrada de la CCAA de Madrid después de no poder jugar un importante partido por el número de contagiados por el virus hoy día casi todos sus jugadores están infectados, e incluso en el Real Madrid un jugador del primer equipo ha resultado infectado, y una vez más sin embargo las estadísticas de contagios del virus en Madrid son muy inferiores a las de Catalunya. Aquí alguien miente y diría que se quién es. Inexplicablemente, la policía municipal de Lleida lleva interceptados más de 10 autobuses procedentes de Andalucía, cargados de temporeros que viajaban gratis, y alguno de ellos infectado por el virus. Aquí alguien está haciendo trampa, y diría que también se quién es.

He explicado varias veces en este blog que en mi primer viaje al Reino Unido cuando todavía estudiaba la carrera me enteré que la característica fundamental que los británicos asignan a los españoles es la falsedad y el engaño. Entonces me sorprendió, pero no tardé muchos años en darles la razón porque es una opinión muy fundada.

La frase que da título a esta nota se repite incesante y diariamente en toda Catalunya desde que el gobierno inició la estrategia totalitaria, estúpida, represiva y franquista para combatir el independentismo, estrategia que además contribuye enormemente a que cada día sean más los que en Catalunya sueltan la frase.

Si hay algo que demuestre de forma clara y contundente que España no solo no es una democracia o un Estado de derecho, sino que está sumamente lejos de parecerlo es precisamente la reacción del Estado ante el independentismo catalán, con absoluto desprecio por la Justicia, las leyes, Derechos Humanos y mínima decencia.

En 2006 el PP se dio cuenta de la enorme fuente de votos que podía ser la catalanofobia y Mariano Rajoy con enorme irresponsabilidad empezó pidiendo “firmitas contra Catalunya”, de las que, por cierto, recogió cerca de 5 millones. A continuación, hicieron lo legal y lo ilegal para anular el recién aprobado Estatut de Catalunya y el resto de partidos de Madrid se apuntaban a conseguir votos de la catalanofobia al tiempo que en Catalunya el independentismo crecía de manera exponencial, y así hasta el estallido del 1-O.

Lo peor de todo el panorama es que la ciudadanía española, embrutecida e idiotizada por la pocilga mediática, no solo no reacciona, sino que existe la impresión de que la mayoría catalanofoba está encantada con lo que se está haciendo en Catalunya

Las últimas semanas parece como si el Estado hubiese decidido llegar hasta el final y solucionar el problema como siempre lo han hecho, matando catalanes, aparte el escándalo de los teléfonos intervenidos en que una vez más, y por supuesto, nadie en Madrid sabe nada y por esta razón no se va a permitir investigarlo, esta misma semana el indecente juez Marchena ya ha dejado bien claro que no va a autorizar ni uno solo de los permisos penitenciarios plenamente legales de los presos políticos, mientras el Tribunal Supremo que preside, que en lo único que es supremo es en tomarse la Justicia a cachondeo, reduce a menos de la mitad la condena de los asaltantes de la librería Blanquerna en ¡¡¡¡2013!!!! Que todavía no han pasado ni un segundo en la cárcel, y si algo está claro es que ni la van a oler. Según el TS la condena se reduce porque no aprecia «motivos ideológicos» En España ser nazi y llevar banderas nazis no es por ideología? Y por lo visto ser juez y blanquear nazis tampoco.

Hace mucho tiempo que no alcanzo en absoluto a comprender que todavía haya quien no solo no entiende el independentismo catalán, sino que lo considera una traición, cuando no hay razón alguna para que los catalanes formemos parte de un país en que, sino la mayoría, una parte muy importante de su ciudadanía nos odia profundamente, y que nadie me diga que esto no es cierto cuando ha quedado archidemostrado en los últimos diez años.

Si en el Reino Unido hubieses usado la misma absurda estrategia hoy Escocia ya sería independiente y se habría armado un inmenso escándalo al rechazar los medios de comunicación y la ciudadanía los métodos totalitarios y el desprecio a los derechos humanos.

España tiene propietarios, que son los grandes bancos, las grandes empresas y las grandes fortunas, que estafan a la ciudadanía con productos y servicios más caros y de peor calidad de la que debería ser, para lo que cuentan con el apoyo y la obediencia del gobierno, gane quien gane las elecciones, mientras la estupidez ciudadana sigue votando a los mismos de siempre.

Aparte del gobierno también apoyan a los propietarios del país la pocilga mediática madrileña y sus extensiones al resto de España, manejada por una serie de personajes sumamente siniestros, como el catalán Mauricio Casals, presidente de La Razón, y uno de los jefazos de A3Media, su objetivo es que nos creamos las falsedades y mentiras que publican.

Desde que empezaron a aparecer las barbaridades de Juan Carlos de Borbón en la prensa extranjera su objetivo ha sido convencernos que es inviolable y por tanto por más barbaridades que haya cometido no puede ser perseguido y mucho menos condenado a penas de prisión o sanción económica, lo que ocurre es que al tiempo que se aseguran que no se investigue a fondo la inviolabilidad de Juan Carlos de Borbón, ocultan que persiste una obligación, la tributaria, porque aunque Juan Carlos de Borbón haya defraudado, al conocerlo el gobierno, si fuese un ciudadano normal, aparte posibles penas de cárcel y sanciones, sería inspeccionado, se evaluaría la cifra defraudada de impuestos y se exigiría su pago inmediato.

Es decir, si en este país hubiese un mínimo de seriedad haría meses, quizás años, que la Hacienda Pública habría estado investigando las cuentas de Juan Carlos de Borbón en Suiza y Panamá, habrían establecido el importe total del fraude y habrían exigido su pago.

Lo curioso es que en los muchos casos en que miembros de la familia real han defraudado a Hacienda a lo largo de la historia se ha aplicado siempre el mismo criterio, a pesar que, que yo sepa, ni existe ni ha existido nunca Ley alguna que conceda exención fiscal a la familia real.

La única conclusión de esta nota solo puede ser que Juan Carlos de Borbón es un criminal, y también lo son los propietarios del país y todos los que le han ayudado y apoyado para cometer sus fechorías.   

El descubrimiento del uso del programa Pegasus que permite el acceso a toda la información de un móvil en el del President del Parlament Catalán, y en el de más de cien políticos independentistas catalanes es la demostración definitiva de que el régimen del 78 no es ni democrático ni es un Estado de Derecho ni nada que se le parezca.

¿Cómo puede califcarse de Estado de Derecho un país  en el que , entre muchas otras cosas, se ha celebrado un juicio, el del procés, en que se condenó a nueve prisioneros políticos a más de cien años de cárcel en base a las manifestaciones de testigos en que todos, absolutamente todos, cometieron perjurio explicando los echos al reves de como ocurrieron y medio mundo lo había visto por TV, o unos jóvenes del pueblo navarres de Alsasua, condenados también a penas de cárcel mediante un fallo que se basó en hechos opuestos a los que se probaron en el juicio. Un país donde el CNI, el servicio de inteligencia está claramente implicado en la organización y ejecución de dos atentados en Barcelona y Cabrils, y ahora se informa que utilizaron el programa Pegasus con multitud de políticos catalanes. Pero un país en que no se permite la más mínima investigación de cualquier hecho que pueda ser incriminatorio para el Estado.

En mi opinión el problema de España es doble, por un lado la transición de dictadura a supuesta democracia se llevó a cabo sin ruptura, y muchos cargos importantes continúan controlados por franquistas, y si a ello añadimos que el fascismo católico del Opus Dei controla la Justicia, los cuerpos de seguridad y otras partes del Estado, el resultado no puede ser más catastrófico.

Nunca he entendido que valencianos, andaluces, navarros y los demás, no pidan también la independencia, tal como ocurre en Catalunya, no por sentimiento nacionalista, sino para salirse del desastre catastrófico en que el régimen del 78 ha convertido a España.

Por supuesto, la señora Montero, ministra de Hacienda y portavoz ha dicho que, como siempre, el gobierno no sabe, no contesta, y que como ocurre en temas que afecten a la corona o el gobierno no se va a llevar a cabo investigación alguna, ¡¡faltaría más ¡!.

Y el silencio de la U.E. y la Eurocámara no hacen más que demostrar que hace años que murieron.

De la larga lista de barbaridades que ha cometido Juan Carlos de Borbón nadie ha mencionado nunca una que, en mi opinión es sumamente grave, resulta que de todas las familias reales de todo el mundo sus grandes amigos, que le regalan proyectos para empresas españolas y los millones de dólares de 100 en 100, son los de la monarquía saudita, la más tiránica y sanguinaria del mundo.

En Arabia Saudita se aplica la Sharía (Ley Coránica) como única Ley fundamental, lo que supone que los infieles son tratados como ciudadanos de quinta categoría, a menos que sean señores importantes de países extranjeros, un país donde está prohibido contratar obreros extranjeros a menos que sean musulmanes, que de cualquier forma son tratados como esclavos, donde el divorcio es muy simple, se le dice a la esposa tres veces que se la repudia y a continuación se la echa de casa con lo puesto, donde hasta hace pocos años las mujeres tenían prohibido conducir cualquier vehículo, y desconozco si todavía tienen prohibido viajar en el asiento de delante de un coche a menos que el conductor sea su padre, hijo, marido o hermano, un país en que al ladrón con pocas contemplaciones y poca evidencia se le corta la mano derecha y al homosexual se le condena rápidamente a muerte, y, en fin, un país cuyo príncipe heredero puede organizar el asesinato en un país extranjero de un crítico del régimen como Khashoggi sin que ocurra absolutamente nada. Lo curioso es que son los únicos grandes amigos que se le conocen a Juan Carlos de Borbón, probablemente la razón sea que no hay monarquía o país que encaje mejor en sus “virtudes”.

Por cierto, cuando todo el mundo creía que la actual ministra de Economía Nadia Calviño iba a ser la escogida para presidir nada menos que el Eurogrupo, el elegido ha sido el irlandés Donohoe, y aunque en mi opinión y por una vez la U.E. ha hecho lo correcto, muchos periodistas hablan de un fracaso de Pedro Sánchez. Aparte que, en más de una ocasión, y a consecuencia de afirmaciones absurdas de la ministra he afirmado que a veces parece como si la señora ministra hubiese obtenido su título de economista por correspondencia, ¿Cómo puede nombrarse presidenta del Eurogrupo a la ministra de Economía que ha diseñado el peor plan de recuperación de la economía de toda la Unión, que incluye aumentos de impuestos, cuando todos, y digo todos, los demás efectúan reducción de impuestos, en algunos casos sustanciales?. Aunque sea por casualidad, por una vez en la U.E. han actuado con sentido común.    

Resulta que China no solo no acepta responsabilidad alguna sobre el Covid 19, sino que ahora tienen la descomunal desfachatez de afirmar desde Wuhan que la expansión internacional del virus se inició en España, concretamente en Barcelona.

Desde el inicio de la pandemia he pensado que el gobierno chino tiene una gran responsabilidad, muchísima más de ls que se le exige, sobre la aparición y desarrollo del virus. En primer lugar porque no es el primero que aparece en la misma zona, sino el tercero o cuarto en veinte años, una zona en que precisamente el ejercito chino tiene un importante laboratorio bacteriológico. En segundo lugar porque la actitud del gobierno chino no solo no ha contribuido a esclarecer los hechos, sino al contrario, se han opuesto de manera rotunda a cualquier investigación internacional sobre el origen del virus. Encima China resulta ser el único país beneficiado en algo por el virus al haber vendido millones en material de defensa del virus. Está claro que el gobierno chino está haciendo todos los esfuerzos para ser la primera superpotencia mundial, que teniendo en cuenta que para ellos la democracia no existe y su sistema se basa en la obediencia forzada, es una noticia desastrosa para el resto del mundo.

Por cierto, el aumento de impuestos a los más ricos impuesto por Pablo Iglesias y aceptado por Pedro Sanchez, aparte una profunda y absurda estupidez acabará siendo un engaño al pueblo.

En España los impuestos a las grandes fortunas son los normales en los paises serios. El tipo máximo impositivo en España es del 47%, similar al de otros países y aumentarlo no va a servir de nada porque el problema es España, según datos del propio ministerio de Hacienda es que debido a una normativa compleja, una larga lista de privilegios, y probablemente también la falta de inspección, los grandes bancos, las grandes empresas y las grandes fortunas, en la realidad, pagan tipos impositivos ridículos sobre sus beneficios y rentas, porcentajes tan bajos que en algunos casos llegan a estar por debajo del 5%. Es decir, el aumento de tipos a los más ricos no serviría de nada, y lo que deberían hacer es revisar la legislación fiscal en su totalidad y reforzar la inspección de Hacienda.      

Estos días se cumplen diez años de la mayor demostración que el sistema político español y una democracia no se parecen en nada: el fallo del Tribunal Constitucional que destruyó el Estatut de Catalunya del 2006.

A pesar que en la burla de juicio al procés el Tribunal no pudo calificar los hechos como golpe de Estado todo el mundo en Madrid califica a los presos políticos como golpistas, en cambio en el peor golpe de Estado del país de hace diez años nadie habla de golpe.

Después de pasar todos los trámites legales sin que un solo jurista de prestigio, o un comité parlamentario criticase el texto, el Tribunal Constitucional a instancias del PP de Mariano Rajoy se cargó el Estatut.

Desde incluso antes de la fecha del fallo he pensado que toda la operación estaba planificada y premeditada para que el PP aprovechase al máximo los muchos votos de la catalanofobia. Los políticos españoles son tan irresponsables que, en vez de solucionar un problema, la catalanofobia, como es su obligación, lo exacerban al máximo para conseguir votos. Me refiero en general a todos los políticos españoles porque todos han acabado copiando el uso de la catalanofobia para captar votos.

Encima, para que quedase bien claro que solo se trataba de perjudicar a Catalunya algunos de los artículos anulados por el fallo del Tribunal Constitucional habían sido copiados por otras CCAA, pero en esos casos no se anularon.

Una pancarta de la manifestación contra el fallo lo definía muy bien, en catalán decía “NO NOS VAMOS, NOS HECHAN”